No se como estará vuestra mochila pero en
mi casa llevamos algunos las mochilas saturadas. Yo en concreto tengo a una de
mis hijas que su mochila va a estallar. Entre los libros que mete por miedo a
que se le olvide algo, por miedo a que
se le presenten más miedos en su día escolar y los miedos que lleva dentro, es una mochila que pesa, pesa mucho. Yo por
las mañanas cuando la veo colgársela a su espalada miro para otro lado, ¡me da
tanta pena lo que pesa! ¡y llevar ese peso todo el día hasta las cinco de la
tarde! Tantos miedos dentro de esa
mochila que solo pensarlo se me pone un nudo en la garganta.